2014-3T.L4 La Salvacion

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Lección 4: Para el 26 de julio de 2014

                                                                LA SALVACION

Texto clave: Juan 3:16

               

I. ¡MOTIVA!:         Actividades iníciales.

Pregunta para dialogar: ¿Qué obstáculos impiden que la gente acepte la oferta de vida eterna?

Ilustración: Lleva un regalo para un miembro de tu clase tal vez para alguien que viene por primera o segunda vez, y explica que la salvación que Dios nos da es como ese regalo.

Resumen: Veremos en la lección, la obra salvadora de Jesús, como un don de Dios y su grande amor por nosotros.

II. ¡EXPLORA!:   

1.     LA SALVACIÓN ES UN DON DE DIOS

A)    El amor de Dios:

1.     La palabra amor, proviene del verbo griego agapaō “amar” y el sustantivo relacionado, agapē “amor”, que revelan el constante y profundo amor de Dios hacia sus criaturas.

2.     Dios no solo nos ama, sino que él es amor (1 Juan 4:8), ama también a los que no le aman.

3.     El verdadero amor se conoce por las acciones (1 Juan 3:18), y Dios al amarnos actuó y dio a su único Hijo para nuestra salvación

B)    ¿Cuál debería ser nuestra actitud respecto de Dios y su gracia? Lucas 18:9 al 14

1.     Nuestra salvación no depende de nuestros meritos, la salvación es gratuita es un don de Dios, un regalo.

2.     Entonces nuestra actitud debe de ser de gratitud por ese maravilloso regalo.

2.     LA INICIATIVA DE DIOS EN LA SALVACIÓN

A)    ¿Qué  hace el Padre por nuestra salvación?

1.     El Padre por amor proveyó los medios para que nuestros pecados sean perdonados envió a su Hijo para salvarnos (Juan 6:44) (1 Juan 4:10).

2.     Jesús así lo dijo: “el que me envió” o “el Padre que me envió” (Juan 7:29; 8:29; 12:49).

3.     El hijo tuvo un rol importante en la salvación Jesús dijo: “el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Luc. 19:10).

B)    ¿Cuán lejos está dispuesto a ir el Señor en sus esfuerzos por salvarnos? Lucas 15:3-10.

1.     Dios no está esperando pasivamente que vayamos a él, sino que sale a buscarnos.

2.     No importa si estamos extraviados en un lugar peligroso y lejano, o estamos perdidos en casa, el Señor nos busca incansablemente hasta encontrarnos.

3.     LA SALVACIÓN REQUIRIÓ LA MUERTE DE CRISTO

A)    La Biblia habla de la muerte expiatoria de Cristo:

1.     Juan el Bautista describió a Jesús como “el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” (Juan 1:29).

2.     Abraham reveló por fe que “Dios se proveerá de cordero para el holocausto”; y el Señor proveyó el animal para ser sacrificado en lugar de Isaac (Gén. 22:8, 13).

3.     Los israelitas:

a)     En Egipto, sacrificaron un cordero como un símbolo de su liberación divina de la esclavitud del pecado (Éxo. 12:1-13).

b)     En el servicio del Santuario, se sacrificaban dos corderos cada día, continuamente: uno en la mañana y otro al atardecer (Éxo. 29:38, 39).

c)     Los sacrificios eran símbolos del Mesías que vendría, quien “como cordero fue llevado al matadero” porque “Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros” (Isa. 53:6, 7).

4.     Jesús anunció repetidamente su muerte aunque, para los discípulos, era difícil entender por qué tenía que morir él (Mat. 16:22).

B)    ¿Qué ilustraciones usó Jesús para indicar que él moriría como nuestro sustituto? Mat. 20:28; Juan 10:11.

1.     “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos” (Juan 15:13),

2.     “por muchos [...] para remisión de los pecados” (Mat. 26:28).

3.     “Nadie me la quita [mi vida], sino que yo de mí mismo la pongo”, declaró Jesús (Juan 10:18).

4.     Caifás dijo: “que un hombre muera por el pueblo, y no que toda la nación perezca”. (Juan 11:49-51).

4.     LIBRES DEL PECADO

A)    Libres del pecado gracias a Cristo:

1.     Sin Cristo éramos esclavos del pecado y por el pecado condenados a la muerte, porque la paga del pecado es muerte (Rom. 6:16-23).

2.     Pero, Jesús vino “a pregonar libertad a los cautivos, [...] a poner en libertad a los oprimidos” (Luc 4:18).

3.     No cautivos literales, sino prisioneros espirituales de Satanás (Mar. 5:1-20; Luc. 8:1, 2).

B)    ¿Qué grandiosa promesa se encuentra en Juan 8:34 al 36?

1.     El único Libertador verdadero es el Hijo, que nunca fue esclavo del pecado.

2.     Jesús se gozaba en perdonar pecados y así liberar a los cautivos de Satanás:

a)     Perdono al paralitico: le dijo: “Hijo, tus pecados te son perdonados” (Mar. 2:5).

b)     Perdono a una mujer en casa de un fariseo: “sus muchos pecados le son perdonados” (Luc. 7:47). Entonces, dijo a la mujer: “Tus pecados te son perdonados” (Luc. 7:48).

3.     En ambos casos Jesús perdono en primer lugar sus pecados porque ellos estaban arrepentidos de la vida que habían llevado y luego los restauro física y espiritualmente.

5.     CRISTO NOS DA VIDA ETERNA

A)    La vida eterna hoy:

1.     Cristo tomo nuestro lugar en la cruz para que nosotros podamos salvarnos: “para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:15).

2.     La promesa de salvación y la vida eterna está expresada en tiempo presente:

a)     “El que cree en el Hijo tiene vida eterna” (Juan 3:36).

b)     El que cree en Cristo “tiene vida eterna” ahora, “y no vendrá a condenación” en el día final, sino que “ha pasado de muerte a vida” (Juan 5:24).

c)     Podemos disfrutar una vida más rica y plena. “Yo he venido”, dijo Jesús, “para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia” (Juan 10:10).

d)     Incluso la muerte, temporal, no nos quita esa promesa y vida eterna.

B)    ¿Qué metáfora usó Jesús para expresar los resultados de aceptarlo? ¿Qué significa eso en nuestra vida diaria práctica? Juan 6:35, 47-51.

1.     Nosotros debemos aceptar a Cristo en nuestra vida, así como el alimento diario nutre nuestra vida física así Cristo en nuestro corazón debe alimentarnos espiritualmente.

2.     El aceptarlo en nuestro corazón nos dará la vida eterna “el que come de este pan, vivirá eternamente” (Juan 6:58)

III. ¡APLICA!:

¿De qué modo se podría animar a las personas a aceptar la generosa oferta de vida eterna?

IV. ¡CREA!:

Con la clase: Realicen una visita a un amigo que no sea miembro de la Iglesia, y compartan el mensaje de salvación.

V. RESUMEN

La salvación que Dios ofrece es una liberación completa del pecado y de sus consecuencias.

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