Lección 4: Para
el 1 de febrero de 2014
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Texto clave: Mat. 15:30, 31
I. ¡MOTIVA!: Actividades
iníciales.
Pregunta para dialogar: ¿Cuáles son tus
historias favoritas de curación en el ministerio de Jesús, y por qué?
Ilustración: Pide a los miembros de tu clase que compartan algunos
consejos de remedios caseros para enfermedades leves.
Resumen: Examinaremos en la lección que, En el curso de su ministerio, Jesús dedicó más tiempo a la curación de los enfermos
que a la predicación.
II. ¡EXPLORA!:
1. EL MESÍAS SANADOR
Lee
Isaías 53:4, Mateo 8:17 y Juan 9:1 al 3.
A) Muchas veces cuando alguien atraviesa por una prueba, una enfermedad, generalmente
se cree incluso en la iglesia que es un castigo de Dios, así lo creían los
amigos de Job, que pensaban que las calamidades que le sobrevinieron era un
castigo de Dios, así también lo pensaban los discípulos de Cristo.
B) Cristo con su vida demostró que la enfermedad no proviene de Dios, sino del
enemigo y que si a veces Dios permite que la enfermedad llegue a nuestra vida
es con un propósito definido, de que nosotros nos arrepintamos o cambiemos de
actitud en algo malo que hacemos.
C) Cuando Cristo estaba en la tierra sano a muchos enfermos, eso demuestra que
el no quiere el sufrimiento de las personas, por esta razón el mismo llevo
nuestras enfermedades en su cuerpo.
2. SANAR EL CUERPO
Lee Marcos 2:1 al 12. ¿Qué nos enseña con respecto a la conexión entre
la enfermedad física y la pecaminosidad?
A) Jesús en su ministerio no solo sanaba el cuerpo físico como algo
independiente del Espíritu, el perdonar los pecados, restauraba al ser humano
tanto físicamente como mental y espiritualmente.
B) En la antigüedad el pensamiento pagano separaba el cuerpo del alma, despreciándose
el cuerpo y se creía que una vez muerto el alma se liberaba del cuerpo enfermo
y débil, Cristo demostró que para que se opere la verdadera sanidad es
necesario restaurar el aspecto Espiritual, muchos de los enfermos que sano habían
llegado a esa condición por causa del pecado, para ellos antes de restaurarlos físicamente
era necesario restaurarlos espiritualmente.
3. SANAR LA MENTE Y EL CUERPO
Lee Mateo 6:19 al 34, 1 Pedro 5:7, 2 Corintios
4:7 al 10, Filipenses 4:4 al 9, y 1 Juan 3:20 al 22. ¿Cómo podrían los
principios que enseñan estos versículos aliviar la ansiedad, la culpa y la
vergüenza que son la base de muchas enfermedades mentales?
A) Cristo entendía que la restauración del cuerpo proviene de una salud
mental si el corazón está en armonía con Dios aun y cuando no exista la sanidad
corporal, el espíritu se vigoriza y es capaz de hacer frente al momento de
prueba que se atraviesa.
B) Es por eso que El sabia la importancia de primero restablecer en el ser
humano, enfermo o no, la comunión con Dios, esa también es nuestra labor hoy, a
través nuestro, Jesús quiere traer esa sanidad al mundo.
C)
Veamos lo que E. G.
de White dice al respecto:
“Cada día trae
sus aflicciones, sus cuidados y perplejidades; y cuando los encontramos, ¡cuán
prontos estamos para hablar de ellos! Intervienen tantas preocupaciones
prestadas, se abrigan tantos temores, se expresa tal peso de ansiedades que
cualquiera podría suponer que no tenemos un Salvador compasivo y
misericordioso, dispuesto a oír todas nuestras peticiones y a ser nuestro
protector constante en cada hora de necesidad” (CC 123).
4. LA RESURRECCIÓN Y LA VIDA
Lee Luc. 7:11-17; Mar. 5:21-43; Juan 11:37-44
¿qué gran esperanza hay en los versículos?
A)
Debemos entender que
en ocasiones aun cuando se haga el ungimiento de los enfermos y se ore por
ellos, estos mueren, y lo hacen porque es la voluntad de Dios, pues al final
aun y sea doloroso El sabe cuando llamarnos a descansar.
B)
Lo maravilloso es que
no todo termina ahí, pues si hemos entregado nuestra vida al Señor, el dia
señalado cuando el retorne a la tierra, y si fuimos llamados al descanso, es
decir si morimos, tenemos la seguridad de que resucitaremos. “los santos del Altísimo [...] poseerán el reino
hasta el siglo, eternamente y para siempre” (Dan. 7:18).
5. EL LEGADO DE CURACIÓN DE JESÚS
Lee
Hechos 3:1 al 19, 5:12 al 16, 9:36 al 42 y 20:7 al 10; 1 Corintios 12:7 al 9 y
28 al 31; y Santiago 5:13 al 16.
A)
Jesús
y los discípulos obraron muchos milagros de sanidad, no lo hicieron por un
poder especial que existía en ellos, lo hacían porque estaban en comunión con
Dios y era El quien restauraba y sanaba a los enfermos.
B)
Los
discípulos en la historia de la Iglesia primitiva también manifestaron el poder
de Dios a través de ellos en los primeros ministerios.
C)
Hoy
el mismo poder que sano en la antigüedad, no ha variado, Dios es el mismo de
ayer, y esta dispuesto a, mediante nosotros, y nuestra consagración, sanar como
Jesús sano.
III. ¡APLICA!:
¿Piensa cuantas veces Dios te ayudo
cuando estabas enfermo, que le dirías hoy por todo ese amor y cuidado?
IV. ¡CREA!:
Con la clase: Con la clase hagan una lista de las personas que están
enfermas y un rol para visitarlos, encarga a los miembros de la clase para que
visiten a estos hermanos.
V. RESUMEN
Existe una relación íntima entre la salud física,
la emocional y la espiritual. Jesús sabía de un vistazo cómo ministrar a la
gente con la que se encontraba. ¿De qué modo puedes hacer lo mismo?
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DE INVESTIGACION BIBLICA DE LA IASD
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